El orégano en la cosmética no es una hierba muy popular, y de forma completamente inmerecida. Gracias a componentes como carvacrol y timol , el orégano es un poderoso antibiótico, siendo una planta ideal para piel joven propensa a inflamaciones y acné. Como el orégano crece perfectamente en el alféizar , siempre tendrás materia prima para elaborar productos cosméticos caseros.
Orégano para el rostro
La propiedad del orégano de desinfectar y reducir la inflamación lo convierte en un aliado eficaz para el cuidado de la piel problemática. A continuación, encontrarás varias recetas comprobadas con orégano para el rostro.
Limpieza facial al vapor con orégano
Si tienes piel grasa o mixta, prueba la limpieza facial al vapor con orégano. Hierve 3 cucharadas de orégano en 0,5 litros de agua. Cuando la temperatura del vapor sea soportable, coloca tu rostro sobre la infusión para que el vapor actúe. Es recomendable cubrir tu cabeza con una toalla. Realiza el procedimiento durante al menos 10 minutos.
Hielo cosmético
Deja enfriar la infusión y utilízala para hacer hielo cosmético con el que limpiarás tu rostro. Como paso final de la limpieza con vapor, puedes pasarte hielo frío por el rostro, lo cual ayudará a cerrar los poros abiertos y eliminar restos de grasa cutánea, espinillas e incluso puntos negros. Además, este procedimiento tonifica y rejuvenece la piel.
Tónico con infusión de orégano
Agrega 2 cucharadas de orégano a un vaso y medio de agua hirviendo. Deja infusionar y exprime cuidadosamente la hierba con una gasa. Usa la infusión para limpiar generosamente tu rostro y cuello con un algodón empapado en el tónico, tanto por la mañana como por la noche. Deja que la piel lo absorba. Este procedimiento limpia la piel, la matifica y la enriquece con nutrientes.
Mascarilla con orégano
Ideal para piel grasa, porosa y propensa a inflamaciones. Tritura 2 cucharadas de hojas frescas de orégano hasta formar una pasta, o humedece 2 cucharadas de orégano seco y también tritura. Mezcla con una clara de huevo y aplica en el rostro. Después de 30 minutos, enjuaga con agua tibia.
Crema para piel seca
Es especialmente buena para mejorar la piel extremadamente seca, ralentizar su envejecimiento y pérdida de elasticidad. Coloca una cucharada de orégano (fresco o seco) en el fondo de un frasco de medio litro y vierte 100 gramos de aceite de oliva (preferiblemente de extracción en frío). Deja reposar durante un día, luego coloca la mezcla al baño maría durante 2 horas. Con esto obtendrás aceite de orégano. Filtra la mezcla con una gasa y almacénala en un recipiente de vidrio (ideales los frascos pequeños de especias con cuello ancho). Luego, vuelve a colocarlo al baño maría. Por separado, derrite 2 cucharadas de cera de abejas y agrégala al frasco con el aceite de orégano. Retira del fuego. Después de una hora, la crema estará lista para usar. Este producto se conserva hasta seis meses sin perder sus propiedades.
Cualquier producto, ya sea mascarilla, crema, bálsamo, tónico o loción, puede ser enriquecido con aceite esencial de orégano o cualquier otro aceite aromático que te guste.
Orégano para los pies
Si tus pies están cansados o hinchados, prueba baños fríos con infusión de orégano. Disuelve 2 cucharadas de orégano en agua hirviendo y deja reposar durante 40 minutos. Añade la infusión al agua a temperatura ambiente y sumerge los pies en el baño hasta que sientas alivio. Las propiedades del orégano también tienen aplicaciones medicinales .
Orégano para el cabello
Gracias a los componentes astringentes del orégano, el enjuague con su infusión trata la seborrea, es adecuado para el cabello graso, fortalece los folículos pilosos y da volumen al cabello.